Para todos aquellos que justifican su presencia en la Revolución Cubana, por favor, lean estas estrofas.
MARIUCHA
¿Fuiste tú el que lo mandó allí?
SERGUEI
Sí, fui yo… Mariucha… Tuvo la opción. Muchos de ellos tuvieron la opción.
MARIUCHA
Era eso o la cárcel.
SERGUEI
Todos tenemos una alternativa, Mariucha. Podemos hablar, podemos callarnos. Podemos irnos, podemos quedarnos. Siempre tenemos una opción.
Mariucha emplea el argumento como último recurso de defensa moral de su amante de juventud, Dimitri, un oficial blanco ahora al servicio de la NKVD de Stalin. La idea es que a Dimitri lo forzaron a trabajar para la NKVD. Si no, lo mataban. El coronel Serguei Petrovich Kotov, un héroe de la guerra civil y marido actual de Mariucha, es el que responde, impasible, que Dimitri tuvo “la opción”. El diálogo se produce en un episodio entre las 1.27.46 hora, minutos y segundos y las 1.29.32 de Quemado por el sol, la película de Nikita Mijailkov de 1994. Está claro entonces. Siempre tienes una opción. Pero tú eres el que elige.