martes, 26 de diciembre de 2023

La luz y el ruido

Nueva edición italiana de I condannati dell´Escambray (Condenados de Condado)

La nota de Ago Edizioni:

El libro

Calvino afirmó: «El éxito de Norberto Fuentes (comparable al de un Beppe Fenoglio entre nosotros) se debe, además de a su rico humor, a haber sabido encontrar el modelo adecuado del género: El ejército a caballo de Isaac Babel, el escritor ruso de la guerra civil. No es casualidad que un rápido «homenaje a Babel» esté contenido en uno de los relatos del escritor cubano, que ya sabe que su forma de contar historias -como la de su maestro- no agradará a los celosos guardianes de la oleografía oficial. (Y así de hecho sucedió).»

Corría el año 1970, Norberto Fuentes acababa de completar su primera colección de cuentos que fue publicada en Italia por Einaudi. El mundo ha cambiado, ha pasado medio siglo, el régimen cubano se ha abierto y las categorías del siglo XX se desmoronan cada día más hasta perder sus formas originales. Sin embargo, leyendo los relatos de Fuentes, entre el capitán Descalzo y el Bunder Pacheco, entre los bandidos y los soldados, los agricultores y los ganaderos, todo parece haber permanecido inmóvil, igual. Hay una miseria humana en la guerra que nunca cambia, algo que afecta del mismo modo al alma de los hombres cuando empuñan un rifle. Los obtusos sentimientos de conquista que nublan el pensamiento otrora revolucionario de los conquistadores se mezclan con los pequeños deseos de quienes sufren la guerra, de los soldados que temen morir sin desayunar, incapaces de verbalizar un inconveniente que les ha causado, sin que estén preparados para afrontarlo.

La escritura de Fuentes es rápida, instintiva, agitada e impensada, un lenguaje que puntúa los disparos de los AK-47 en la selva cubana, imágenes que se suceden, fragmentos divididos por los límites de las historias pero que crean un fresco general que regresa al lector un espectro visual, como dice el propio Fuentes en la introducción inédita publicada en esta edición: «Tenía la habilidad de los dioses pero en el sentido contrario. Nombré las cosas por última vez no para crearlas, sino para presenciar su extinción. En cierto modo, éste era precisamente el destino de mi libro: ser un destello, un estallido de luz y ruido que inmediatamente se apaga.»

«Jefe, ¿y si ha llegado mi día? Quizás me maten en esta operación y todavía no lo sé. Me muero sin haber desayunado, jefe.» 
 
Norberto Fuentes nació en La Habana en 1943. Durante la lucha contra las bandas del Escambray en Cuba, fue corresponsal del frente, experiencia de la que se basó en
Condenados de Condado

Disidente del régimen cubano, en 1993 se vio obligado a exiliarse en Estados Unidos, donde se refugió gracias a la ayuda de Gabriel García Márquez y William Kennedy. Conocido y apreciado por numerosos intelectuales como Mailer y Cortázar, hoy reside en Miami donde continúa su actividad como escritor y periodista.