-
Muere emblemático ex fiscal de la Revolución Cubana
-
Le decían nada menos que “Charco de Sangre”, por haber
enviado a más de 100 “contrarrevolucionarios” al paredón, entre 1961 y 1964. Fernando
Flores Ibarra, según fuentes de su entorno familiar, falleció la
semana pasada, a los 82 años, en Santiago de Chile, dónde residía desde hace
más de una década con su esposa, la chilena Ana María Burdiles Pinto. No fue hasta 1961, tras Bahía de Cochinos, que
Flores comenzó a aplicar justicia con mano de hierro, contra lo que él mismo
describió como “los esbirros de la dictadura (de Batista) que no pudieron irse
de Cuba”. Fernando Flores Ibarra nunca se arrepintió del rol que debió jugar
como fiscal en los primeros años de la Revolución Cubana. “Esas muertes no me
han quitado el sueño. Jamás he dejado de dormir un minuto, ni siquiera la
siesta”, dijo en una entrevista en 2001.
En la foto, desde la izquierda, José Odriozola, uno de los jefes del centro de inteligencia cubano en Francia y con una carrera ascendente dentro de los “servicios” (coronel y segundo jefe de la Dirección de Inteligencia hacia 2010), y que se subordina al coronel Antonio de la Guardia mientras dure la misión que lo ha traído a París; Fernando Flores Ibarra, embajador plenipotenciario de Cuba ante Francia, un verdadero duro del cuerpo diplomático y con una hoja de servicios difícilmente superable como fiscal de la Revolución; Ana María Burdiles Pinto, esposa de Flores Ibarra, chilena estudiante en Cuba, y él casado en segundas nupcias con ella; una persona que no tenemos permiso para identificar, su rostro cubierto por aplicación del Adobe Photoshop; y el coronel Antonio de la Guardia, viejo compañero del embajador Flores Ibarra, con quien comparte anécdotas de los buenos tiempos, y que se encuentra en París con la misión —asignada por La Habana— de comprar armamento occidental para las tropas angolanas que enfrentan la intervención sudafricana en la profundidad de su territorio. La silla vacía a la derecha de la foto, y el postre en sus inicios sobre la mesa, es de este autor, que se ha levantado para tomar las fotos desde un ángulo aceptable. El compañero embajador concluirá la velada con un excelente lancero de Cohiba. Puede asegurarse que esta noche, en todo París, nadie va a disfrutar de un habano tan soberbio. El exclusivo restaurante Fouquet's en los Campos Elíseos. Marzo 20, 1988. Domingo.
Fotografías por Norberto Fuentes. Copyright © Norberto Fuentes, 1988, 2012.
Totalmente prohibida su reproducción.